El Conde Harold y la casta boluda

Harold Mayne-Nicholls es el ejemplo viviente de quien destruye con los pies lo que hábilmente construyó con las manos, es el ejemplo de cómo la necedad y la prepotencia pasan a ser defectos tan grandes que opacan y desvanecen virtudes tan envidiables como la inteligencia y la honradez. Mayne-Nicholls es ejemplo viviente de que pisar callos y rasguñar espaldas no es gratis para nadie, que no es una falta, sino un delito.

Presentando propuestas inteligentes y en contra de todos los intereses malignos, descarados, oscuros y matonescos del fútbol, se ganó la presidencia de la ANFP destronando a uno de los más siniestros personajes de nuestro deporte rey en su historia. Fue valiente y decidido en salir a buscar lo mejor de lo mejor para potenciar el único producto rentable del fútbol, la selección, y contrató a un entrenador controvertido que aún costando una millonada podría haber resultado ser un tiro por la culata. Pero se la jugó, no cedió ni un milímetro por su convicción en el hombre que estaba trayendo, y sacó de la baraja el As que le faltaba para completar el Black Jack.

Hasta allí todo bien. Pero luego se olvida que cuando hay ovejas en el rebaño se las debe contar todos los días. En una semana el lobo se puede haber llevado varias y “te jodiste” te mandó saludos. Mayne-Nicholls saca cuentas ligeras y se mete con los que no perdonan. Trata de escudriñar la billetera de los adinerados para dar a los pobres, pero se olvida que Robin Hood ya es historia. Se siente seguro y habla a la prensa en el peor de los tonos: el del erudito que da cátedra. Se contagia con la prepotencia de su entrenador y se torna distante, inalcanzable, intocable, al punto que de mutuo propio y sin que tenga necesidad de hacerlo, comienza a gatear entre las patas de los caballos y se lleva a Bachelet al mundial opacando al Presidente y a la Primera Dama. Para qué hablar de los tristes episodios de te-doy-la-mano … no-te-la-doy … te-saludo … no-te-saludo … ji, ji ji. Esas boludeces se pueden hacer con los compañeros del colegio, pero no se le puede agarrar el culo a la autoridad. Aprenda carajo !!!

Pero Mayne-Nicholls no aprende. Es persistente en su necedad y en su tozudez. Debe negociar pero no quiere, debe conciliar pero no concilia. Se siente ganador, omnipotente, porque cuenta las ovejas y cuenta mal. No es capaz de darse cuenta que es tal el descontento que muchas ovejas se fueron solitas a vivir con el lobo.

Cuando llega la hora del recuento y el saldo es para atrás, don Harold actúa aún peor, descalifica, los trata de faltos de palabra, casi llora en público, retoma los acuerdos a los que no quiso llegar y trata de revivirlos, y para terminar de poner la torta, saca su As de corazones a una conferencia de prensa que hasta sus más incondicionales defensores califican como una descarada intervención. Eso se llama partida de caballo ingles y llegada de burro. Mal, todo mal.

Y del lado del lobo se juntan las voluntades de ponerle un parelé a Mayne-Nicholls pero ninguno de los grandes tiene cachete para esa jeringa, por lo que comienza la búsqueda de la cabeza de turco. También sacan cuentas erróneas y estiman que la salida de Harold no será, necesariamente, la pérdida de Bielsa, pero a necio, necio y medio, entonces se consiguen el peor candidato posible de imaginar, optan por el único disponible y van a la pelea con un señor que genera más anticuerpos que Luis Pasteur, que se expresa en forma tan prepotente como el conde Harold, que trata a los futbolistas como mercancía de corsario y que tiene un prontuario gigante en google que se riega como la pólvora. Igual de mal. Ninguna medida desesperada puede salvar a Mayne-Nicholls, que se retira cabeza gacha y la pelea llega a la calle. Hinchas blancos, azules y cruzados encuentran por primera vez un enemigo común y se juntan frente a la ANFP a insultar a los nuevos jerarcas, se promueve el abandono de las subscripciones al CDF, fuente vital para el financiamiento de los clubes y el sindicato de futbolistas declara la guerra.

Quienes serían los animales que pensaron que esto se manejaba de taquito…? Que van a hacer a hora para recomponer el pastel…? Traer a Borghi…? Ni con Mourinho la componen, pero como lo de ellos son los clubes, la selección va a retroceder a la era del pelado, así se ahorran las lucas que dejaron de ganar con Harold.

Todo lo que vendrá ahora será sucio, a la antigua, con listas impugnadas, con acuerdos chimbos hechos en el restaurant de la Cuca y con cheques pasados bajo la mesa… como antes. Nuestro fútbol podrá tener sociedades anónimas modernas, pero sigue siendo la misma cueva de Alí Babá y los treinta y tantos ladrones, hoy rebautizados como los treinta y tantos boludos, siendo Mayne-Nicholls Alí Babá… digo yo.